Ruperto Portela Alvarado / Columna

Í N D I C E . . . / Ruperto Portela Alvarado

ISSSTE, UNA EMPRESA LUCRATIVA…

+ Característica de malos servicios…

+ Los negocios de la Seguridad Social…

+ FOVISSSTE, la minita de oro…

+ Cobros en Salarios Mínimos; pagos en UMAS…

LOS INÚTILES FUNCIONARIOS…

Si de algo se puede acusar y que es característica del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) es su ineficiencia y pésimos servicios, tanto en el área médica como en el otorgamiento y cobros de préstamos a corto plazo, especiales e hipotecarios, donde los derechohabientes abarrotan todos los días las oficinas de la Delegación para reclamar la mala atención.

La falta de sentido común y preparación de sus funcionarios para atender a los derechohabientes, es una constante que podemos ver a diario y en repetidas ocasiones. Claro, hay sus pequeñas excepciones, como en todo lo que constituye este universo. Puedo decir que en el directorio de la Dirección General del ISSSTE que jefatura LUIS ANTONIO RAMÍREZ PINEDA, hay funcionarios de alto nivel de inoperatividad, desconocimiento de la materia que les ocupa y una total ineficiencia en el trato con los derechohabientes.

La Delegación del ISSSTE-Chiapas no es la excepción cuando el titular de esa dependencia, ingeniero OSCAR PINO CHONG, nunca está en su oficina y menos que atienda a quienes solicitan una audiencia de manera urgente o la fecha que a él se le pegue la gana de recibirlos. No es menos significativa y deficiente la presencia de otros funcionarios como el caso de NELSON SALAZAR MENDIGUCHÍA, Subdelegado de Prestaciones Económicas, quien se desempeña con ínfulas de todopoderoso y prepotencia casi por encima del Delegado y que en tiempos de ALBERTO DE LA TORRIENTE GONZÁLEZ como Subdelegado Médico y titular de la delegación, se creía el mismo titular.

Estos ejemplos van juntos con otros funcionarios de la Delegación del ISSSTE-Chiapas, donde no hay control ni orden porque el mismo Delegado OSCAR PINO CHONG no tiene autoridad ni le interesa lo que sucede en la dependencia a su cargo. Para corroborar lo anterior, solo en el área médica, el desabasto de medicinas es próximo a los 82 por ciento y las consultas de especialidad se siguen prorrogando hasta tres o cinco meses, cuando las autorizan.

Tampoco cuentan las clínicas y hospitales con insumos médicos, desde gasas hasta jeringas en muchos casos, por ejemplificar la ineficiencia. El servicio de citas médicas que se ofrecen por teléfono o internet, no funcionan y se tiene que recurrir a favores para que el Delegado, Subdelegado Médico, un director de clínica o un empleado de cualquier nivel, pueda conseguir que les atienda un médico de medicina familiar para obtener los medicamentos, y eso, ¡cuando hay!.

Claro, como me dijo una empleada de la dependencia: “el FOVISSSTE no es una beneficencia” o la respuesta de otro trabajador de la clínica de medicina familiar cuando le solicité la dotación de medicinas: “tenemos más de 135 mil derechohabientes y de todo corazón le comento que usted y su esposa no son los únicos que toman esos medicamentos”. Son ciertas ambas aseveraciones, pero el ISSSTE es para servir y no servirse como ha sido siempre con los delegados y funcionarios de los diversos niveles.

Desde siempre se han señalado los índices de corrupción en el ISSSTE, desde la dirección general hasta las delegaciones como la de Chiapas, donde el saqueo ha sido indiscriminado o los negocios turbios a la mano del funcionario como aquella transa que hizo MIGUEL ÁNGEL YUNES LINARES con la contratación del servicio telefónico e internet para las citas médicas, de la que se llevó de un solo jalón más de 20 millones de pesos, sin que él haya sido el único. También las licitaciones en obras y mantenimiento; servicios de vigilancia y limpieza, son motivo de corrupción que nunca han parado.

El ISSSTE maneja miles de millones de pesos en diversos rubros de prestaciones sociales y atención al derechohabiente como son los préstamos a corto, mediano y especiales por los que cobra un interés “moderado”, pero que al fin representa un negocio redondo con dinero de los propios afiliados, que está dando vueltas y ganando sustanciosos dividendos. Nada es de gratis. Solo por un préstamo de 70 mil pesos, se tienen que pagar en dos años de plazo, más de 8 mil pesos de intereses.

Donde está la “minita de oro” del ISSSTE es en los “préstamos hipotecarios” que otorga el FOVISSSTE a través de financieras particulares a las que luego le compra las deudas para después cobrar con intereses del 6 por ciento anual, pero de los que son millones de “beneficiarios” que quedan ahorcados por más de 15, 20 y hasta 30 años con descuento del 30 por ciento de su salario mensual.

El hecho es que si el salario mínimo sube, la cuota del pago hipotecario se eleva en el mismo porcentaje, mientras que de cada aportación a la cuenta, aproximadamente el 15 por ciento se va a intereses y el resto a capital. Un enredo de pagos, donde el derechohabiente es el que pierde. Por eso los costos de la vivienda se elevan considerablemente.

Por ejemplo, un crédito hipotecario de 452 mil pesos del que, a 15 años de distancia se han pagado 946 mil 294 pesos con 22 centavos y restan por pagar, 130 mil 087.04 pesos, es un negociazo con dinero oficial. O sea, que el costo total de la casa –en este caso-- será finalmente de 1 millón, 076 mil 381.26 pesos de la que se pagará “solo de intereses”: 624 mil, 281.26 pesos.

Otro chanchullo mediante el cual los derechohabientes son esquilmados por el ISSSTE, es el pago de las pensiones y jubilaciones que las hacen en UMAS (Unidad de Medida y Actualización) que para este año 2021 está en 89.62 pesos, cuando es obligación hacerlas en “salarios mínimos” que actualmente es de 141.70 pesos diarios. Una diferencia de 52.08 pesos diarios que no le han pagado desde 2016 a los pensionados y jubilados a pesar de las sentencias a favor emitidas por la Suprema Corte de Justicia de la Nación y que el Instituto no quiere atender y pagar. Todavía este martes, la dirigencia nacional del SNTE informó de una nueva resolución al respecto de la SCJN.

Si entiendo que el ISSSTE y el FOVISSSTE en consecuencia, “no son beneficencia”, pero tampoco deben ser empresas lucrativas en contra de los derechohabientes que pagan una cuota que en términos globales representa una sustanciosa entrada de dinero a la institución que dice “es de los Trabajadores del Estado”. Por eso no se vale la arrogancia y las respuestas groseras de los funcionarios y empleados que se creen dueños del Instituto y nos hacen un favor al atendernos. Pero al fin y al cabo, así es y está este país de corrupción, donde “el que no transa, no avanza” y en el ISSSTE, las cosas no tendrían por qué ser diferentes…

Se acabó el mecate… Y ES TODO…

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