Ecocidio

Elva Narcía / ASICH

*Del Podcast Próxima Estación
Glifos Comunicaciones A.C.

Tras la carta que relatores y relatoras de Derechos Humanos de Naciones Unidas hicieron llegar al gobierno en la cual expresan “su grave preocupación” por los posibles impactos del llamado Proyecto de Desarrollo Tren Maya para las comunidades indígenas, ambientalistas recomiendan la suspensión de la obra.
La carta que los relatores envían al gobierno de México se basa en un documento que les fue enviado el pasado mes de junio, firmado por siete organizaciones de derechos humanos nacionales e internacionales, en el cual alertan sobre la manera cómo se está desarrollando el llamado Tren Maya, uno de los organismos firmantes fue el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA).
Lo que CEMDA propone, comenta en entrevista su director, Francisco Xabier Martínez Esponda, es que se cumpla con el marco jurídico, que se cumpla con el régimen de derechos humanos “la historia del derecho es la historia de limitar al poder, es la lucha por dar prioridad a la razón sobre la fuerza y aquí lo que vemos es que la fuerza quiere tener preponderancia”.
“Seguir el camino del derecho, el camino de los derechos humanos significaría que la obra tendría que ser suspendida, no podemos continuar con un proyecto con el cual no tenemos la información adecuada”.
La lista de preocupaciones expresadas por los relatores de la ONU es larga y entre ellas destaca la manera como se llevó a cabo en noviembre y diciembre de 2019, el proceso de consulta a pueblos y comunidades indígenas.
“En noviembre, diciembre que se hicieron estas consultas lo que claramente quedó evidenciado es que no se cumplió con el estándar, en primer lugar, la consulta no se rige por las reglas del gobierno, se tiene que regir por las reglas de cada uno de los pueblos y aquí lo que tuvimos fueron dos sesiones de cinco horas en donde se decidió la suerte de las comunidades en el futuro inmediato” explica el director de CEMDA.
En la carta que enviaron los relatores y relatoras de la ONU al gobierno de México expresan su preocupación también por el estudio de impacto ambiental, del cual se les informó, “su procedimiento fue inadecuado, con resultados sin fundamento y sin solidez metodológica”
También les preocupan la modificación del régimen de tenencia y propiedad de la tierra que pudiera perjudicar los derechos de los pueblos indígenas sobre sus tierras tradicionales, el desplazamiento forzoso de comunidades asentadas en las orillas de las vías, también hay preocupación y dudas sobre la pertinencia de la participación de las Fuerzas Armadas en una obra pública que no es de emergencia, esto debido a que los tramos del Tren Maya que van de Tulum, Quintana Roo a Escárcega, Campeche, cruzando la Reserva de la biosfera de Calakmul serán construidos por la Secretaria de Defensa Nacional.
Los relatores y relatoras del Consejo de Derechos Humanos de la ONU señalan que es su responsabilidad clarificar las alegaciones que les fueron llevadas a su atención y por ello pidieron a las autoridades de México, entre otras cosas, indicar las medidas previstas para desarrollar los necesarios estudios de impacto social, cultural, ambiental y de derechos humanos con la participación de las comunidades indígenas.
También solicitaron información sobre las acciones previstas para continuar con las consultas a los pueblos indígenas y compartirles información completa y adecuada sobre los impactos que podría causar el proyecto
“¿Qué es lo que viene? Seguir apostando porque el gobierno mexicano pueda reconsiderar, porque pueda tomar la mejor decisión posible en conjunto con los pueblos y eso significa la apertura de espacios de diálogo como tendría que ser la consulta previa, libre e informada, como tendrían que ser las consultas públicas de los proyectos sometidos a evaluación de corte ambiental, tiene que ver con nuestra exigencia de que el proyecto sea evaluado de manera completa por las autoridades ambientales y no fragmentada” detalló el director del Centro Mexicano de Derecho Ambiental.
En un comunicado oficial el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) informa que la carta de los relatores ya fue respondida por el Estado mexicano a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores en un documento de 34 páginas y anexos.
En su respuesta a Naciones Unidas, Fonatur y demás dependencias del Estado mexicano, que coadyuvan en la implementación del proyecto de desarrollo Tren Maya, “reiteran su compromiso de atender, mitigar y controlar los posibles impactos del proyecto y a respetar los derechos de los pueblos indígenas. La carta íntegra se hará pública de común acuerdo con el sistema de Naciones Unidas”.
En su respuesta, el gobierno mexicano asegura que el proceso de diálogo no se detiene con la conclusión de las asambleas informativas y consultivas de carácter general implementadas en noviembre y diciembre de 2019, sino que se extiende a través de la fase de seguimiento y verificación del proceso de consulta.
“El diseño de este proceso de retroalimentación permanente ha logrado la identificación de incompatibilidades técnicas o de carácter ambiental en algunos casos, y como resultado se han realizado correcciones sobre el trazo de manera consensuada con las comunidades, notablemente en el tramo 4”.
Queda pendiente conocer en detalle el documento que las autoridades mexicanas enviaron a Naciones Unidas. ASICH